En 1973, los estudios sobre el estado de vulnerabilidad del jaguar indicaron que la especie se encontraba en peligro de extinción en el continente americano. En Costa Rica sus poblaciones silvestres se han reducido drásticamente en las últimas décadas por la alteración de su hábitat y caza indiscriminada.
El alto nivel de vulnerabilidad de las poblaciones silvestres del jaguar (Panthera onca) generó el interés de un grupo de empresarios, quienes unieron sus esfuerzos y crearon el Fideicomiso – Programa de Protección Jaguar, iniciando sus actividades el 20 de diciembre de 2007. La iniciativa recibió al apoyo económico y logístico de BAC San José, S.A., CRT Tour Operator & Destination Management Services y Agrosuperior S.A. Los recursos aportados por estas empresas fueron administrados por parte del Departamento de Fideicomiso de BAC San José. Se unieron a la causa otras firmas proveedoras de servicios que aportaron sus contribuciones en especie para cumplir en ese entonces con este trabajo pionero.
El Programa de Protección Jaguar fue creado para preservar y conservar el jaguar, mediante el apoyo al esfuerzo científico de la Universidad de Costa Rica y la Universidad Nacional en labores de investigación y protección del Jaguar en Costa Rica. Uno de los aspectos que da especial particularidad al programa es que se basa en una iniciativa del sector privado que promueve la creación de alianzas estratégicas para apoyar la investigación que realizan las Universidades estatales en materia de conservación.
Con motivo del avance del Programa y la necesidad de ampliar su financiamiento se constituye la Fundación Jaguar en octubre del 2010, dirigiendo sus esfuerzos en promover la investigación interdisciplinaria en marcha mediante la recaudación de fondos privados para destinarlos hacia las actividades científicas que se desarrollan dentro de la red del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC).
Conservar al jaguar como indicador principal de la salud de nuestros bosques.
Coordinar los esfuerzos de todos los sectores de la sociedad para salvaguardar las poblaciones del jaguar y asegurar su conservación.
1) Proveer los recursos logísticos y económicos para el desarrollo de una asociación académica entre la Universidad Nacional (UNA) y la Universidad de Costa Rica (UCR), con el objetivo común de proteger, investigar y monitorear las poblaciones del jaguar y sus presas en su hábitat natural.
2) Determinar la variabilidad genética de las poblaciones del jaguar silvestre y en cautiverio en todo el territorio nacional, mediante la identificación demarcadores moleculares a partir de muestras de heces, sangre y otros tejidos; estos datos proporcionarán una mejor comprensión de la salud de las poblaciones del jaguar y de sus presas.
3) Crear conciencia entre las comunidades vecinas que rodean el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC) de Costa Rica para proteger a las poblaciones del jaguar y sus presas como un indicador clave de la salud de sus respectivos ecosistemas. Educar activamente a las comunidades acerca de la interdependencia del jaguar con su presa y su hábitat.
4) Impulsar programas de educación ambiental para evitar el conflicto hombre-jaguar-ganado y fortalecer zonas de amortiguamiento que rodean las áreas de conservación y lograr clasificar las zonas de alto riesgo de conflicto. Nuestro objetivo es trabajar con los ganaderos para reducir la persecución vengativa del jaguar.
5) Se requiere modificar los alcances de la Ley de Conservación de la Vida Silvestre(N° 7317), capítulo IV, artículo 22: “Artículo 22.- La vida silvestre exótica o nativa que cause daños en algún ecosistema o en la agricultura, ganadería y salud pública podrá capturarse, controlarse, aprovecharse, eliminarse o reubicarse de conformidad con las disposiciones que se determinen en el reglamento de esta ley, previa realización de los estudios técnico – científicos y las evaluaciones económicas de costo beneficio correspondientes. Sin embargo, en caso de inminente peligro a la integridad de las personas, por parte de un espécimen silvestre, podrá una persona, en defensa, proceder a capturar, controlar o, como último recurso, eliminar el espécimen amenazante, sin que tal acción entrañe sanción alguna. Quedan a salvo las competencias del Servicio Nacional de Salud Animal y del Servicio Fitosanitario del Ministerio de Agricultura y Ganadería y del Ministerio de Salud, en materia sanitaria. Se dejará como último recurso el sacrificio del organismo con los métodos que mejor eviten el sufrimiento. (Así reformado por el artículo 1 de la ley No. 9106 del 20 de diciembre del 2012).
Quedan a salvo las competencias del Servicio Nacional de Salud Animal y del Servicio Fitosanitario del Estado del Ministerio de Agricultura y Ganadería y del Ministerio de Salud, en materia sanitaria. Se dejará como último recurso el sacrificio del organismo con los métodos que mejor eviten el sufrimiento. (Así reformado por el artículo 1 de la ley No. 9106 del 20 de diciembre del 2012).
Decano de la Escuela de Biología, Programa de Genética UCR.
Asistente Programa de Genética, Escuela de Biología - UCR.
Asistente Programa Jaguar.
Representante Ministerio de Ambiente y Energía - MINAE.
Representante Municipalidad de Escazú.
Tesorero.
Decano de la Escuela de Biología, Programa de Genética UCR.
Dirección Ejecutiva
Dirección Financiera.
Mi interés por estudiar la vida silvestre despertó en 1994, después de haber participado en diversos proyectos de genética humana. En ese entonces quise aplicar mis conocimientos en genética molecular a las cuatro especies de primates no humanos que tenemos en el país, considerando que estas especies cada vez estaban peor en términos de abundancia y distribución. Poco después de haber iniciado con los estudios en primates, me interesé por estudios similares en las seis especies de felinos silvestres del país, particularmente el jaguar. Considerando lo difícil que es tener una muestra biológica de estos animales, me planteé la necesidad de maximizar este recurso y realizar no solo estudios de genética molecular sino determinar la presencia de agentes infecciosos (bacterias, virus, parásitos y hongos) que podrían estar contribuyendo a la reducción de las poblaciones.
Con este enfoque, nació un proyecto de investigación en la Escuela de Biología de la Universidad de Costa Rica. Debo resaltar que este es un estudio pionero tanto en Costa Rica como a nivel regional.
Debido a que el jaguar es una especie altamente compleja de muestrear, comenzamos analizados individuos en cautiverio. Por medio de FundaZoo, obtuvimos el permiso de tomar muestras de los jaguares en el Zoológico Simón Bolívar y el Centro de Conservación de Santa Ana. Cuando realizamos la visita a este centro en Santa Ana, una periodista del periódico La Nación se encontraba ahí y nos entrevistó. Entre muchas cosas mencioné que no contábamos con presupuesto para el desarrollo de este estudio y que estábamos realizando las gestiones pertinentes para buscarlo.
Es importante desarrollar estudios de genética poblacional del jaguar para determinar los niveles de variabilidad genética y su estructuración. De una u otra forma se pueden determinar los efectos que han ocasionado la fragmentación del hábitat y la reducción poblacional debido a las amenazas actuales. Este tipo de información son los pasos preliminares para determinar las mejores medidas de protección dentro de las unidades de conservación.
Para garantizar la supervivencia a largo plazo de felinos en Costa Rica, se precisan de estrategias de conservación que promuevan mantener altos niveles de flujo de genes entre las distintas áreas geográficas. Por lo tanto, desarrollar estudios de genética poblacional se podrá determinar barreras biológicas de su flujo genético y determinar el grado de conectividad y aislamiento de las distintas poblaciones en el país.
Este proyecto se ha podido financiar mediante distintas alianzas estratégicas. Sin embargo, falta mucho por hacer, por ejemplo, hay que mejorar sustancialmente el muestreo y continuar el análisis de los agentes infecciosos.
Es una tarea compartida e ineludible proteger a esta especie clave en los ecosistemas de nuestro país. Si se protegen a los jaguares, muchas otras especies se verán beneficiadas también.
Es el único gran felino en usar el agua como medio de transporte para explorar su territorio además de ser del único del género panthera de los que les gusta el agua además del tigre asiático. Es el mejor nadador entre los grandes felinos.
La Fundación Jaguar desea expresar su profundo agradecimiento a los contribuyentes que, al igual que nosotros, han creído en la importancia de apoyar el esfuerzo de las Universidades estatales en la conservación y preservación del jaguar.